sábado, 19 de octubre de 2013

Tratamiento del cáncer de mama

Ante esta enfermedad se procede con cuatro tipos principales de tratamiento:
Cirugía
  • Conservación de la mama: este tipo de cirugía incluye lumpectomía, en la que se estirpa el tumor y parte del tejido circundante y mastectomía parcial donde se retira la parte de la mama que contiene el tumor y el tejido que la rodea.
  • Mastectomía total: se extirpa toda la mama y se extraen ganglios linfáticos axilares para biopsar.
  • Mastectomía radical modificada: se extirpa la mama, ganglios linfáticos y revestimiento de los músculos pectorales.
Antes de la cirugía se localiza el ganglio centinela, siendo este el primer ganglio que recibe el drenaje linfático del tumor. Para ello se inyecta una sustancia radiactiva que fluye a través de los conductos linfáticos, detectando la metástasis de los ganglios, y si deben ser extirpados o no.
Radioterapia
Utiliza normalmente rayos X para destruír las células cancerosas o impedir que crezcan. Puede ser externa, que envia radiación externa al área del tumor o interna con una sustancia inyectada dentro del tumor o cerca.
Quimioterapia
Actúa al igual que la radioterapia pero el tratamiento se realiza con medicamentos inyectados en el torrente sanguíneo, músculo, liquido cefaloraquídeo, órgano o cavidad.
Terapia con hormonas
Se extraen las hormonas o se impide su acción, impidiendo el crecimiento de las células cancerosas.
Estas son las terapias más comunes pero paralelamente se están realizando ensayos clínicos como quimioterapia de dosis alta con transplante de células madre.

Sígnos y síntomas del cáncer de mama

En las etapas precoces del cáncer de mama, la enfermedad no suele producir ningún tipo de síntoma.
Los síntomas más frecuentes son:
  • Aparición de un nódulo en la mama que previamente no existía. A la hora de explorarte los senos, es necesario elegir el día en el que se deja de menstruar, ya que, los pechos suelen estar hinchados y es difícil encontrar posibles bultos.
  • Dolor en la mama a la palpación.
  • Cambio de tamaño de alguna de las mamas.
  • Irregularidades en el contorno.
  • Menor movilidad de una de las mamas al levantar los brazos.
  • Alteración en la piel de la mama como: úlceras, cambios de color y aparición de lo que se denomina piel de naranja (por su aspecto similar a la piel de dicha fruta).
  • Cambios en el pezón, como puede ser la retracción del mismo (hundimiento).
  • Aparición de un nódulo en la axila.
  • Existen otros síntomas como son el cansancio o el dolor óseo localizado, que pueden aparecer en las fases más avanzadas de la enfermedad.

El cáncer como enfermedad crónica



La idea de centrar nuestro blog en el mundo de las enfermedades crónicas tiene como objetivo proporcionar la información necesaria sobre algunas de las enfermedades que como en 2008, se cobraron la vida de 36 millones de personas, de las cuales la mitad era de sexo femenino y el 29% era de menos de 60 años de edad. Aprovechando que hace 2 días, 18 de octubre, fue el Día Mundial contra el Cáncer de mama hemos decidido hablaros sobre esta enfermedad que es el tumor más frecuente en las mujeres occidentales. En España se diagnostican alrededor de 22000 nuevos cánceres de mama al año.



Enfermedad crónica, ¿qué es?

La creación de este blog surge como propósito de dar a conocer las diferentes enfermedades crónicas y su repercusión en nuestra sociedad dado que son las principales causas de mortalidad en el mundo, siendo responsables del 63% de las muertes.
Además, es importante que las personas que sufren este tipo de enfermedades conozcan mejor su situación y puedan resolver sus dudas y temores. Por eso esperamos que mediante este blog podamos servir de ayuda tanto a pacientes como a sus familias.

Se denominan enfermedades crónicas aquellas enfermedades de larga duración, y que por lo general, tienen una lenta progresión. Por término medio, toda enfermedad que tenga una duración de más de seis meses puede considerarse como enfermedad crónica.

La condición de enfermo crónico supone un reto importante para la familia y el sistema sociosanitario. Además, existe una relación directa entre cronicidad y dependencia, y la cronicidad se asocia al consumo de recursos sanitarios, poniendo en peligro la sostenibilidad del sistema de atención sanitaria.

La gravedad de las enfermedades crónicas es muy dispar: pueden ser enfermedades crónicas sin gravedad alguna, como por ejemplo la rinitis crónica, o potencialmente graves, como la arteriosclerosis.

Aunque la ciencia médica ha logrado grandes progresos en el tratamiento de los efectos físicos de estas enfermedades, muchos pacientes siguen enfrentándose a un gran desafío para su salud mental y emocional.

Los pacientes con enfermedades crónicas pueden estar forzados a cambiar sus estilos de vida, como por ejemplo adaptarse a invalideces, o algo que es cada vez más común: limitaciones a la hora de pagar medicamentos y tratamientos costosos.

Entre las enfermedades crónicas destacan las cardiopatías, los accidentes cerebrovasculares, el cáncer, las enfermedades respiratorias crónicas y la diabetes. Las discapacidades visuales y la ceguera, los defectos de audición y la sordera, las enfermedades bucodentales y los trastornos genéticos son otras afecciones crónicas que representan una porción sustancial de la carga mundial de morbilidad.