viernes, 1 de noviembre de 2013

La enfermedad celíaca como enfermedad crónica

La enfermedad celíaca (EC), también llamada celiaquía, es una intolerancia permanente al gluten de trigo, cebada, centeno y probablemente avena que se presenta en individuos genéticamente predispuestos, caracterizada por una reacción inflamatoria, de base inmune, en la mucosa del intestino delgado que dificulta la absorción de macro y micronutrientes.

El sistema de defensa natural del cuerpo, llamado sistema inmunitario, lo mantiene sano al combatir los virus y bacterias, entre otros, que pueden causar enfermedades. Cuando las personas con enfermedad celíaca consumen gluten, el sistema inmunitario reacciona al gluten, atacando el revestimiento del intestino delgado. La reacción del sistema inmunitario al gluten causa daño a las vellosidades, que son bultos pequeños en forma de dedos. Cuando las vellosidades están dañadas, el cuerpo no puede obtener los nutrientes que necesita.



La prevalencia estimada en los europeos y sus descendientes es del 1%, siendo más frecuente en las mujeres con una proporción 2:1.
Un porcentaje importante de pacientes (75%) están sin diagnosticar debido, en su mayor parte, a que la EC durante años se ha relacionado, exclusivamente, con su forma clásica de presentación clínica. Sin embargo, el reconocimiento de otras formas atípicas de manifestarse, oligo y asintómaticas, combinados con la mayor y mejor utilización de las pruebas complementarias disponibles, ha permitido poner de manifiesto la existencia de diferentes tipos de EC:

 Síntomática: Los síntomas son muy diversos pero todos los pacientes mostrarán una serología, histología y test genéticos compatibles con la EC.

Subclínica: En este caso no existirán síntomas ni signos, aunque sí serán positivas el resto de las pruebas diagnósticas.

Latente: Son pacientes que en un momento determinado, consumiendo gluten, no tienen síntomas y la mucosa intestinal es normal. Existen 2 variantes:

                  - Tipo A:  Fueron diagnosticados de EC en la infancia y se recuperaron por completo tras el inicio de la dieta sin gluten, permaneciendo en estado subclínico con dieta normal.
                 - Tipo B : En este caso, con motivo de un estudio previo, se comprobó que la mucosa intestinal era normal , pero posteriormente desarrollarán la enfermedad.

Potencial: Estas personas nunca han presentado una biopsia compatible con la EC pero, del mismo modo que los grupos anteriores,poseen una predisposición genética determinada por la positividad del HLA-DQ2/DQ8. Aunque la serología puede ser negativa, presentan un aumento en el número de linfocitos intraepiteliales. La probabilidad media de desarrollar una EC activa es del 13 % y una EC latente del 50%.

Aquí os dejo información en forma de narración ilustrada acerca de las características de la enfermedad celíaca y los autocuidados recomendados. La enfermedad celíaca vista por sus protagonistas



Síntomas de la enfermedad celíaca

Los síntomas de la enfermedad celíaca son numerosos y variados, y pueden cambiar considerablemente de una persona a otra. En algunas personas esta enfermedad no se muestra con los síntomas frecuentes sino con otros diferentes que no se relacionan con esta enfermedad, por ejemplo las anemias por falta de hierro o los abortos de repetición. Las manifestaciones más características de la enfermedad celíaca son:

  • Diarrea.
  • Pérdida de peso.
  • Anemia por falta de hierro que no responde al tratamiento.
  • Deposiciones frecuentes, blandas, grasientas, pálidas y pestilentes.
  • Dolor abdominal.
  • Hinchazón y gases.
  • Dolores de huesos y articulaciones
  • Abortos de repetición y esterilidad.
  • Alteraciones de las pruebas hepáticas.
  • Edemas.
  • Calambres musculares.
  • Fatiga.
  • Alteraciones psiquiátricas con cambios de la conducta, depresiones, etc.
  • Retraso de crecimiento en los niños. Puede ser el único síntoma de presentación de la enfermedad celíaca. 
  • Lesiones de la boca. La más conocida es una alteración del esmalte de los dientes (hipoplasia), pero, también son frecuentes las úlceras o aftas de repetición.
  • Vómitos y estreñimiento.
  • Menstruaciones irregulares.
  • Uñas frágiles y pérdida de cabello.
  • Problemas neurológicos. Se han descrito epilepsias con calcificaciones cerebrales, ataxia o inestabilidad en la marcha y otros trastornos neurológicos menos frecuentes.

Diagnóstico y complicaciones de la enfermedad celíaca

Diagnóstico

Ante la sospecha de una enfermedad celíaca los procedimientos son los siguientes:
  • Análisis general de sangre: que manifiesta hierro, alteraciones en el colesterol o déficit de vitaminas.
  • Marcadores en sangre: existen una serie de marcadores en sangre que son característicos de la enfermedad celíaca, como los anticuerpos Antigliadina y Antiendomisio. Permiten detectar un gran número de casos, se normalizan progresivamente al pautar un tratamiento, pero no detectan todos los casos por eso es necesario la biopsia intestinal.
  • Biopsia intestinal: consiste en la extracción de un "pellizco" de la mucosa intestinal, para estudiar al microscopio y detectar alteraciones en las células, como atrofia en las vellosidades. Se debe realizar ante la sospecha de la enfermedad celíaca. Se debe realizar una segunda biopsia de control una vez iniciado el tratamiento, para comprobar la recuperación de las células del intestino.

Complicaciones

  • Desnutrición. Provocada por no tratar la enfermedad o tratarla mal, se pierde la capacidad absorción.
  • Pérdida de calcio y densidad ósea. Se pierden en las heces grasas, calcio y vitamina D, en cantidades excesivas. Puede provocar osteomalacia, ablandamiento de los huesos, raquitismo, etc.
  • Intolerancia a la lactosa. A causa de los daños provocados por el gluten en el intestino.
  • Cáncer. En las personas que no mantienen una dieta libre de gluten, puede provocar linfoma intestinal.
  • Complicaciones neurológicas. Puede provocar trastornos en el sistema nervioso, como convulsiones o daño neurológico.

Tratamiento: dieta exenta de gluten

La alimentación en la enfermedad celíaca consiste en hacer una dieta exenta de gluten. Con esta medida de tratamiento se consigue una rápida mejoría clínica en la mayoría de los pacientes. Los incumplimientos de la dieta favorecen la reaparición de las lesiones.
La presencia de gluten en la dieta supone un riesgo importante para el paciente de padecer graves complicaciones que tienen que ver con carencias de nutrientes y otras más graves, que tienen que ver con lesiones neoplásicas. 

Características de la dieta

  • Se trata de excluir completamente el gluten de la dieta. Deben eliminarse los granos de trigo, centeno, cebada, avena, espelta, triticale y Kamut. Los cereales con gluten no solo se plantean como ingrediente básico. También se agregan en pequeñas cantidades durante el procesado o preparación de muchos alimentos. Por esta razón es muy importante el estudio de los etiquetados de los alimentos, información de los fabricantes y asociaciones de enfermedad celíaca.
  • Los cereales sustitutivos son el arroz y el maíz. 
  • Son importantes en la dieta de estos pacientes los alimentos especiales sin gluten (cantidad máxima de gluten menos de 20 ppmillon).
  • Secundariamente a la lesión intestinal puede aparecer una intolerancia a la lactosa, por lo que se hará una dieta restrictiva en lactosa. 


Para más información, podéis entrar en la página de ACEGA (Asociación enfermos celiacos Galicia)